11/29/2013

KEEP CALM...

Ommmmmm Ommmmmm...
Relax...
Paciencia...
Una tila por favor....
Y vísteme despacio que tengo prisa!

En definitiva...mantener la calma. Ése es el pensamiento que deseo invada mi mente cada mañana y noche cuando estoy con mi preciosa tirana...
Y es que estos últimos días no dispongo de mucho tiempo para estar con ella (siii lo sé, tampoco para tener el blog actualizado...) y lo noto muchísimo en la actitud que ella tiene conmigo.
En cuanto nota que me preparo para irme, y/o que la preparo a ella para trasladarla cual paquetito de casa en casa de abuelitos, guardería, tíos, etc. se pone en modo impertinente...me explico... todo le parece mal, no quiere ponerse la ropa que le pongo, no quiere que la peine, no quiere desayunar, no quiere ponerse la chaqueta,.... todo es un motivo para tener una rabieta.
Los primeros días me sacaba de quicio...si a la segunda o tercera vez que le decía las cosas con calma, ella no me hacía caso...me ponía yo en modo ogro-sargento-gritona como si esa fuese la única manera de que acabase cumpliendo mis órdenes.
Pero he llegado a la conclusión que ese estado en mí sólo consigue dos cosas...un berrinche enorme en Alba y un acusado sentimiento de culpabilidad en mí, acompañado de nervios y mala leche para todo el día.
De modo que pensé cambiar de estrategia y mantener la calma siempre que estoy con ella. Porque lo único que le está pasando a mi peque es que intenta reclamar mi atención...y si a su demanda, respondo con gritos...la batallita se transforma en una guerra horrible.
Y sí, a mí me funciona! De hecho cuando grita porque no quiere quitarse el pijama, lo primero que hago es preguntarle si está  triste y si quiere un abrazo...en ese momento su nivel de ansiedad baja levemente...aprovecho, la abrazo y, aunque mis ojos estén pegados al segundero del reloj, intento que no se note la prisa que tengo...Entonces aprovecho para contarle cuentos o cantar mientras nos vestimos...para que se olvide de la razón por la que vamos tan rápidas...
Es un modo de no enfadarnos, pero también de disfrutar el poco tiempo que estamos juntas...
Y es que me estoy dando cuenta que no sólo es con mi hija, es con todas las personas, cuanto más me enfado, menos consigo lo que quiero...
Aunque ufffff cómo me cuesta a veces!!!!